A Coruña, 5 de mayo de 2019.-

A Coruña es una ciudad solidaria, inclusiva, y en la que los movimiento sociales puestos en marcha por los coruñeses siempre han tenido presentes a las personas. “Entidades como la Cocina Económica, toda una institución en la ciudad, es una buena muestra de ello. El trabajo que realizan merece todo el apoyo municipal, y en general de la ciudadanía”, apunta Inés Rey quien, junto a los miembros de su candidatura, celebró una comida solidaria en las instalaciones de la entidad.

Jacinto Torres, actual presidente de la entidad, acompañado de otros miembros de la directiva, explicaron a la comitiva socialista los retos que la entidad tiene para el futuro.

También tuvieron ocasión de recordar con la candidata el papel que su abuelo materno, Luis García del Río, llevó a cabo como tesorero de la Cocina Económica hace años. Hubo tiempo incluso para recordar anécdotas vividas en tiempos pretéritos como cuando García del Río, que ejercía como practicante, tuvo que pinchar un medicamento al entonces presidente, Adolfo Suárez. “Nadie se atrevía”, rememoraron miembros de la directiva que compartieron la vivencia. La imagen de Luis García cuelga de las paredes de la Cocina Económica en numerosas fotografías que la directiva mostró a Inés Rey. Esos recuerdos terminaron por emocionar a la candidata que recordó la figura de Luis García con el lógico cariño de una nieta para con su abuelo.

La Cocina Económica se fundó en 1886 y hoy en día presta servicios a personas usuarias más allá del comedor, que es seguramente la actividad más conocida de las que lleva a cabo. En la entidad se cuenta también el asesoramiento de un asistente social para las personas usuarias. En el llamado Punto Solidario “Luís Rodríguez Lago”, se ha habilitado un lugar de ocio y esparcimiento con televisión, juegos de mesa, biblioteca y sofás, pero también con conexión a internet y teléfono para facilitar la comunicación con las familias. Otra de las aportaciones de la Cocina Económica es el servicio integral de Aseo “Fernando Suárez” en el que hay lavandería y duchas. En el apartado de alimentación, también se reparte comida a domicilio con puntos de reparto en los barrios de Sagrada Familia, Castrillón y Birloque, se dan desayunos y se entrega un bocadillo para que las personas usuarias puedan cenar.